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Portátiles ligeros, económicos… y ahora también más potentes. Con el próximo Acer Aspire One D255, la compañía taiwanesa quiere iniciar una nueva etapa en el sector de los netbooks. Ya no tienen que conformarse con discretas fichas técnicas. Así lo demuestra el cerebro avanzado con el que Acer dotará a este nuevo modelo, un Intel Atom N550 de doble núcleo que trabajará a 1,5 GigaHercios. Con él podrá llevar a cabo tareas a mayor velocidad de lo habitual en este tipo de ordenadores.

Lógicamente, se pueden anticipar las comparaciones con el Asus Eee PC 1215N, un ultraportátil que lleva instalado un procesador similar. No obstante, este modelo de Acer no dispondrá de la unidad gráfica Nvidia ION que sí incluye el de Asus. En su lugar, dispondrá de un chip integrado proporcionado por Intel. Su rendimiento no será por tanto tan completo en ese aspecto, pero a cambio dispondría de una autonomía mucho más extendida (en teoría de hasta ocho horas).

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Por ahora no han trascendido más detalles técnicos de su equipamiento, si bien ya se apunta a que será bastante parecido al del Acer Aspire One D260. Eso nos dejaría con una pantalla de diez pulgadas con retroiluminación LED, memoria RAM de tipo DDR2 ó DDR3 (uno o dos GigaBytes) y un disco duro de hasta 250 GigaBytes. En el apartado de conectividad inalámbrica podría simultanear Wi-Fi, 3G y Bluetooh 3.0. Se espera que además estrene nuevos colores en su atractivo diseño.

El fabricante aún no ha desvelado ni cuál será su precio recomendado, ni cuál será su fecha de lanzamiento exacta (los rumores indican que no debería demorarse demasiado). No se especifica tampoco bajo qué sistema operativo funcionará, teniendo en cuenta que el D260 ofrece Windows 7 y Android a la vez.