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HP ha renovado gran parte de su gama de impresoras profesionales. De todas ellas, las HP Laserjet Pro P1102 y P1102w son las de gama más baja, lo que no quita que vayan como la seda para pequeños negocios y profesionales que necesitan una impresora láser monocromo pequeña y asequible con la que sacar todo tipo de documentos (siempre, eso sí, en blanco y negro).

Ambos modelos disfrutan de un tamaño realmente compacto para tratarse de una láser y son capaces de imprimir en tamaño A4 a un ritmo de 18 páginas por minuto, con un lapso de tiempo en la primera página de 8,5 segundos.

Ambas impresoras se conectan al PC mediante USB y las únicas diferencias entre ellas son que la HP Laserjet Pro P1102w es negra en vez de blanca e integra conectividad Wi-Fi con la que conectarse a un router y funcionar como servidor de impresión. También tiene 8Mb de memoria frente a los 2MB del modelo Pro P1102.

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Ambos modelos cuentan, además, con la tecnología Smart Install, gracias a la que integran los drivers necesarios para su funcionamiento en un pequeño módulo interno de memoria. Ponerlas en funcionamiento es un proceso sencillo. Basta con enchufarlas al PC, encenderlas y aceptar las condiciones de uso. El resto del proceso es completamente automático. Smart Install sólo funciona bajo Windows. Para otros sistemas operativos se provee el típico CD de instalación.

Las impresoras operan a una resolución máxima de 1.200 ppp y su bandeja de alimentación tiene espacio para 150 hojas. Ambas cuentan también con el sistema HP Auto-ON / Auto-Off, que hace que caigan en estado de hibernación cuando no se usan para consumir apenas un vatio de energía. La HP Laserjet Pro P1102 cuesta 110 euros y su contrapartida inalámbrica, la HP Laserjet Pro P1102w cuesta 130 euros. Ambas están ya disponibles.