La firma coreana Samsung quiere llegar a todos los aficionados. Por eso acaban de presentar sus nuevas videocámaras Samsung SMX-K40 y SMX-K45. Dos máquinas  de aspecto y diseño tradicional, compacta y con una óptica decente a partir de235 euros (al cambio actual).

Las dos comparten la misma lente Schneider-Kreuznach, con zoom óptico de 65 aumentos y el indispensable estabilizador de imagen (para reducir las vibraciones en los acercamientos). También poseen de funcionalidad YouTube, para subir de forma sencilla los vídeos al famoso portal de Internet. En cualquiera de las dos encontramos la pantalla LCD de 2,7 pulgadas, así como la batería recargable a través del puerto USB.

La diferencia entre ambas radica en el método de almacenamiento. La Samsung SMX-K40 emplea el sistema tradicional de tarjetas de memoria Secure Digital o SDHC. En cambio, la Samsung SMX-K45 lleva instalada una unidad SSD de 32 gigabytes, pero no permite usar tarjetas adicionales. Lo lógico hubiera sido emplear un sistema híbrido, porque de lo contrario la primera resulta más versátil al permitir el intercambio de tarjetas. Además, la diferencia de rendimiento entre una y otra es poco determinante para el usuario en cuanto a consumo o velocidad de escritura mientras filmamos.

Eso sí. Con estas características, diseño y precio, no se puede esperar que graben en alta definición. El caso es que ambos modelos presentan una resolución estándar de 720 x 480 píxeles. Una definición suficiente para el simple aficionado que quiere grabar el cumpleaños del crío sin complicación y pagando lo mínimo. Por otra parte, ofrece la posibilidad de escalar las imágenes a través de su conexión HDMI, de forma que al reproducir en un televisor HDTV, la calidad de las imágenes mejora.

En Europa se pondrán a la venta en agosto. La SMX-K40 cuesta en Estados Unidos unos 330 dólares (235 euros al cambio actual), la SMX-K45, 500 dólares (355 euros).

Vía: Yahoo