Los Kef iQ90 son unos altavoces de tipo columna con tres vías y dos puertos de graves que apuntan de frente. Es el modelo superior de la Serie Q del fabricante. Su respuesta de frecuencias va desde 33 a 40.000 hertzios, con los filtros de corte situados a 180 hertzios y a 2,5 kilohertzios. Asimismo, presentan una sensibilidad de 91 decibelios.
Cada altavoz lleva dos conos de medios-graves con un diámetro de 165 milímetros de la clase LF desarrollada por el fabricante, que están dotados de una chasis de aluminio con anillos Faraday para eliminar las distorsiones armónicas. Además incluye un cono de 165 centímetros de la clase Uni-Q patentada por la marca con un domo elíptico, así como un tweeter de cúpula de alumino de 19 centímetros de diámetro.
El recinto de los Kef iQ90, al igual que sucede en los modelos que pertenecen a la Serie Q, tiene una forma curvada para minizar las distorsiones producidas por las ondas internas. Está fabricado con MDF laminado y diversas costillas convierten a los recintos en inertes acústicamente. El interior tiene forma de laberinto para eliminar los efectos de coloratura propios de las cajas acústicas de pie. La potencia de amplificación recomendada para el caso de estos altavoces de alta fidelidad es de 15 a 200 vatios. Aparte, estas cajas acústicas están blindadas magnéticamente; por lo tanto, pueden estar situadas cerca de otros aparatos electrónicos de sonido y de imagen sin que se produzcan interferencias.
Los recintos están disponibles en tres acabado: manzano oscuro, nogal americano y negro ceniza. Cada altavoz pesa 16,3 kilogramos, y sus dimensiones son de 94,2 centímetros de alto por 22 centímetros de ancho y por 32,7 centímetros de fondo. El precio recomendado para una pareja de altavoces Kef iQ90 es de 1.600 euros.
