Dentro del público que ya ha pasado todas sus canciones al disco duro, hay un buen número de usuarios que se conforman con sonido similar al de la radio de frecuencia modulada. Los altavoces Blue Ice de Rainbow van dedicados a ese público poco exigente que se conforma con unos altavoces de 40 euros.
Puede que el sonido no sea tan bueno como el de otros aparatos de mayor precio, y que la fidelidad a la fuente original tampoco sea excesiva, pero es un conjunto de dos altavoces más Subwoofer que puede ofrecer 7 W por canal más 14 adicionales del Subwoofer. Los satélites tienen un cono de dos pulgadas con protección antimagnética y un sistema de baja frecuencia de tres pulgadas para los bajos.
Donde si resalta a este conjunto es por su diseño y su originalidad. Los dos canales frontales son unos paneles planos de plástico transparente que en el momento en que comienza el sonido, se iluminan mediante unas pequeñas luces led azules que lanzan la luz sobre el perfil del cristal coloreandolo con suavidad a la par que con elegancia.
Los altavoces disponen de mandos de encendido y apagado, además de una discreta rueda que permite regular el volumen. También hay un mando para regular la cantidad de la potencia de los graves. Aunque no son lo mejor para los amantes de la buena música o de la ópera, pueden resultar perfectos para usuarios con pocas pretensiones que tengan un ordenador en la habitación, y quieran disponer de sonido para navegar y para sus juegos. Incluso puede hacer un buen papel en el cuarto de los niños a la hora de reproducir desde un sintonizador de televisión de tipo USB o desde la película puesta en el reproductor DVD-ROM. Lo mejor de todo es que por ese precio tampoco hay que invertir demasiado en la tarjeta de sonido.
