La holandesa Philips de vez en cuando tiene ocurrencias de lo más pintorescas. Una de las últimas se llama Philips HeatProtect. Este ingenio no es otra cosa que una de esas carcasas de tejido sintético que sirven para transportar el ordenador, pero en este caso, ofrece una función adicional que, de ejecutarse como debe, puede resultar muy útil: la de disipar el calor del netbook.
Exacto, del netbook, ya que tiene las dimensiones apropiadas para un equipo de esta naturaleza. En realidad, al ofrecerse en versiones de diez hasta quince pulgadas, podría servir para pequeños portátiles. Su precio es de 19 euros y sólo se vende a través de la tienda alemana de Amazon.
Vamos a lo que nos interesa, que es la función de disipador. No se trata de una de esas bases conectables por USB y que ventilan los bajos del equipo con aspas adicionales. Con el Philips HeatProtect la técnica se basa en una delgada lámina de aluminio que atrae el calor que genera el netbook y lo distribuye hacia los laterales, evitando que se concentre en el equipo y, así, las consecuentes averías en la circuitería del ordenador.
Por lo demás, el Philips HeatProtect tiene otra utilidad que se le suele presuponer a este tipo de ingenios: la de usarlo como base para reposar el equipo. De esta forma, podemos usarlo para ponerlo sobre las piernas y, sobre el Philips HeatProtect, el propio netbook, evitando posiciones que incomoden al usuario y que le achicharre a causa de la salida de calor del ordenador.
