No tenemos muy claro si la frase “dime de qué presumes y te diré de qué careces” puede aplicarse a este caso. Vamos a ocuparnos de los BenQ GL series, una nueva gama de monitores con panel LED que llevan por bandera un contraste dinámico de infarto: 12.000.000:1. Por más que tratamos de localizar la ratio de contraste base, no hay ni rastro del dato, aunque lo más probable es que se ciña al estándar de 1.000:1 que hereda de los paneles LCD.
Estos BenQ GL series, que se pondrán a la venta en julio a un precio que es una incógnita, estarán disponibles en varios formatos. Los tamaños en que se presentarán los BenQ GL series incluyen las 18,5 pulgadas (para el modelo GL930), 19 pulgadas (GL931), 20 pulgadas (GL2030), 21,5 pulgadas (GL2230), y 22 pulgadas (GL2231).
¿Significa esa alta tasa de contraste dinámico que se asegura una amplia paleta de matices en el color? Sí y no. El resultado sería óptimo si el dato se refiriese a una tasa de contraste estático, pero en el caso de este valor dinámico nos encontramos con que la regulación entre el blanco más brillante y el negro más oscuro aparece de forma, digamos, artificial.
Es el sistema de retroiluminación LED el que le echa una manita a las imágenes que se muestran en pantalla, regulándose la cantidad de luz emitida en función de lo que se muestra en cuadro (para escenas o contenidos oscuros, la iluminación se reduce al máximo, mientras que para emisiones con muchas dosis de luz los dioso LED hacen un sobresfuerzo). Por lo tanto, el contraste real no es, ni de lejos, de 12.000.000:1
En cualquier caso, la gama de monitores BenQ GL series presentan también un tiempo de respuesta de cinco milisegundos, una tasa interesante aunque no apabullante. Lo que no se advierte en esta gama es la resolución de los paneles, aunque sería razonable pensar que se trata de monitores de alta definición. No obstante, al no comprobar en ninguno de los modelos un puerto HDMI pensamos que finalmente pueden no ser pantallas con resolución de 1920 x 1080 píxeles.
