Los nuevos usos del ordenador y la actual experiencia de usuario requieren de nuevos monitores más flexibles y con más prestaciones. Se trata de máquinas capaces de recrear los mejores gráficos a la vez que reproducen películas en alta definición. Esa es la especialidad de la nueva serie de monitores G5 de Acer.
Estas pantallas están especializadas en la reproducción de contenidos multimedia, pero también de juegos de última generación. Hay 5 diagonales de pantalla disponibles, 61 cm (24″), 58 cm (23″), 55 cm (22″), 51 cm (20″) y 47 cm (19″). Dependiendo del tamaño, presentan una resolución Full HD (1920 x 1080 píxeles), HD+ (1600 x 900 píxeles) o HD (1366 x 768 píxeles). El diseño es elegante, pero también se ha tenido en cuenta la comodidad necesaria en un visionado a corta distancia. Por eso tienen una función de inclinación ajustable, algo que resulta en un mejor ángulo de visión.
Las cifras cantan. La reproducción de negros es buena, basta echar un vistazo al contraste de 80000:1, optimizado mediante la tecnología Acer Adaptive Contrast Management. Hay una mayor gradación de color, una paleta más rica, y mayor detalle en las sombras. También se reduce el tiempo de respuesta con la tecnología Overdrive (OD) que realza la experiencia sobre todo con las imágenes generadas sintéticamente por ordenador, y esto es perfecto para la génesis 3D, y también para los videojuegos.
La conectividad depende del tamaño del monitor, pero los más avanzados incorporan VGA estándar, DVI y HDMI. El fabricante ha incluido en estas pantallas diversas tecnologías de mejora de imagen como Acer eColor Management que adapta el rendimiento al tipo de material visionado. Por último, hay una herramienta de calibración del color y de otros parámetros de la imagen, el Acer eDisplay Management, que permite almacenar diversos ajustes personalizados del color.
