El proceso de producción de las pantallas táctiles se ha abaratado hasta tal punto que empiezan a convertirse en objeto de consumo cotidiano, bien por sí mismas, como complementos necesarios en los ordenadores, bien integradas en otros muchos aparatos como teléfonos, reproductores MP3, etc. Lo cierto es que todavía se pueden abaratar más gracias a un poceso recién descubierto por los científicos y que permite crear pantallas de plástico.
Los culpables del invento son los miembros del Instituto alemán Fraunhofer, cuyo invento más popular hasta la fecha es el formato MP3. Ahora están trabajando con pantallas compuestas por nanotubos de carbón, y plásticos un material que es barato y está ampliamente disponible. Pretenden que sustituya a otros minerales más caros y que se utilizan en la actualidad.
En estos momentos, el caballo de batalla de las pantallas, táctiles o no, es el óxido de Indio, un material que recubre la superficie de cristal de las pantallas. Se utiliza en todo tipo de pantallas, en las lcd, los plasmas, OLED, paneles táctiles, versiones electro,, etcétera. Se utiliza tanto, y con tanta profusión, y es un mineral tan escaso, que científicos y fabricantes empiezan a preocuparse por la posibilidad de que se agote en todo el mundo elevando el precio de algunos componentes, y haciendo totalmente imposible la fabricación de otros.
Por nanotecnología se pueden fabricar pantallas similares a las actuales, con todos los tamaños de/imaginables, táctiles y no táctiles, pero creadas con carbón y simples plásticos de bajo coste, uno de ellos procedentes de las botellas de plástico empleadas para el agua.
