Motorola sigue tanteando el terreno para tratar de volver a recuperar su posición en el mercado. El problema es que lo intenta con móviles como este Motorola Evoke QA4. Un terminal que adolece de los mismos males que el Motorola ZN300 y otros de los últimos modelos de la compañía: se queda en tierra de nadie. El diseño es original pero no especialmente distinguido, la pantalla es atractiva pero sin grandes alardes y el resto de su ficha técnica es más bien triste.

Hay que reconocer, sin embargo, que combinar los conceptos “táctil” y “deslizante” es una buena idea. La pantalla es de 2,8 pulgadas (discreta resolución de 240 x 400 píxeles). Para pulsar ágilmente sobre los iconos es un tamaño más que suficiente. Pero para manejar el teclado QWERTY virtual, que se muestra en la interfaz al tumbar el teléfono, quizás sea aún demasiado pequeña. Por eso se agradece que, al deslizar la pantalla, tengamos un práctico teclado numérico.

Más vale que todo lo mencionado anteriormente derive en un manejo sencillo, suave e intuitivo. Porque es realmente la única baza que posee este teléfono. Del resto nos queda una pobre cámara de sólo dos megapíxeles de resolución. Y si acaso, su memoria interna de 256 megabytes, que al menos se puede ampliar mediante tarjetas microSD.

Otra incoherencia más es que, aunque incluye iconos de acceso directo a YouTube, Picasa o MySpace, carece de conectividad Wi-Fi. En cambio, si dispone de navegador GPS integrado (A-GPS). Al final lo que nos queda es un móvil de pantalla táctil con teclado, pero que ni puede conectarse a Internet a través de redes inalámbricas, ni posee una cámara decente, ni posee ninguna función realmente destacable. De momento saldrá a la venta en Estados Unidos, pero es bastante probable que Motorola también lo traiga a Europa (afortunadamente en versión 3G).

Vía: Gizig