Es una pantalla, es de plasma y tiene 145 pulgadas de diagonal. Pero lo más sorprendente es que sólo mide un milímetro de grosor. Éste es el último invento del fabricante japonés Shinoda Plasma Corporation. No es de extrañar que el peso del conjunto sea de 7,2 kilogramos. Se trata de la pantalla más ligera y maleable vista hasta la fecha.

La pantalla se compone de seis módulos de un metro cuadrado cada uno. Integrados todos ellos, se convierte en una gran pantalla de tres metros de ancho por dos metros de alto. Gracias su minúsculo espesor puede adoptar una forma curva característica ya vista en otro prototipo de 125 pulgadas.

Comandada por el ingeniero Shinoda Tsutou, la compañía nipona se empeña en sorprendernos cada vez con pantallas de mayor tamaño. Tras la promesa de Shinoda Plasma Corporation de ofrecer una pantalla de 143 pulgadas, parece que sus expectativas se han visto superadas. La joven empresa japonesa, fundada en el año 2005, basa sus pantallas gigantes en una tecnología denominada PTA (Plasma Tube Array). Finísimos tubos con una masa gaseosa en su interior y recubiertos por capas fluorescentes de diferentes colores se encargan de producir las imágenes.

Pese a la magnitud de la pantalla, su resolución no es gran cosa. Se queda en unos aceptables 960×720 píxeles, aunque el fabricante comenta que permite reproducir vídeos en alta definición. El ingenio está enfocado para aplicaciones en el marco corporativo de las empresas, marketing y señalización. Al igual que en anteriores proyectos, la producción de la misma será por unidades limitadas. Aunque por el momento no han facilitado precio orientativo ni fecha de distribución.

Vía: Ubegizmo