Mayor calidad de imagen, menor consumo y mayor ligereza en el diseño del producto. No en vano los monitores LG W2286L-PF y LG W2486L-PF, de 22 y 24 pulgadas repectivamente, incorporan la revolucionaria retroiluminación LED. La misma que la compañía también comienza a utilizar en televisores de gran formato.
A primera vista, los nuevos monitores de LG llaman poderosamente la atención. Presenta un sofisticado diseño, con un grosor de tan sólo 20 milímetros y una serie de imperceptible controles táctiles situados en la parte inferior derecha. Éstos constroles se iluminan cuando detectan la proximidad de la mano del usuario gracias a un sensor situado justo al lado. Dicha tecnología, denominada Live Sensor, se engloba en un paquete de funcionalidades denominado Smart Package. Otra de las funciones del mencionado paquete, como Auto Bright, permite que el brillo de la pantalla se regule automáticamente según la luminosidad del entorno. De tal modo que la calidad de visión no se vea alterada.
El nuevo sistema de diodos LED usado en los monitores de LG permite disfrutar de una alta definición de la imagen para trabajar. No sólo son menos perjudiciales para el sentido de la vista, al atenuar notablemente la fatiga visual. Sino que también lo son en menor medida para la cuenta corriente del usuario, ya que disminuye en un 50% el consumo de energía. Además de considerarse una tecnología que ayuda a la conservación del medio ambiente. Éstos monitores no contienen mercurio, vidrio, gas ni filamento convencional, careciendo por tanto de sustancias tóxicas habituales en los monitores antiguos.
De los dos nuevos dispositivos, sólo el LG W2486L-PF de 24 pulgadas puede reproducir con total fidelidad contenido en alta definición. Con colores más vivos e imágenes más claras y nítidas gracias a un altísimo contraste de 1.000.000:1.
La gama compuesta por los modelos LG W2286L-PF de 22 pulgadas y W2486L-PF de 24 pulgadas se pondrá a la venta en España a lo largo del próximo mes de julio a un precio de 300 y 350 euros respectivamente.
