Las vacaciones veraniegas no son vacaciones sin una cámara fotográfica en el bolsillo. En la era digital la cámara es un dispositivo indispensable, de manera que la firma japonesa Olympus ha dado a conocer dos cámaras sencillas y básicas, hechas a medida de todos los públicos. En esta ocasión, queremos referirnos a la Olympus T-100, una cámara fotográfica que llega de la mano de otra semejante: la Olympus X-560WP, una cámara sumergible pensada especialmente para el verano. En cualquier caso, la Olympus T-100 se posiciona como una compacta básica, apta para todos los públicos y con 12 megapíxeles a cuestas.
Estamos ante una cámara fotográfica compacta de 12 megapíxeles, cosa que nos permitirá realizar impresiones de un tamaño considerable. Al mismo tiempo, incorpora un zoom óptico de tres aumentos y una pantalla LCD de 2,4 pulgadas que nos permitirá visualizar y enmarcar las fotografías de la forma más sencilla. Incorpora enfoque automático de seguimiento para seguir a los sujetos que puedan moverse de forma impredecible, de manera que podamos captar la imagen con nitidez aunque hayan cambiado su posición a la hora de capturar la fotografía.
A esta característica tendríamos que añadirle la detección avanzada de rostros, con la posibilidad de almacenar hasta 16 rostros diferentes y enfocarlos de forma automática. Lleva un estabilizador digital de imágenes y el modo automático inteligente, función que permite a la cámara detectar e identificar la escena: un paisaje, un primer plano o una competición deportiva en movimiento. Los usuarios más creativos podrán disfrutar de los filtros artísticos con distintos toques como Arte Pop, Cámara Estenopeica, Ojo de Pez o Dibujo.
La nueva cámara T-100 es muy económica. Olympus la pondrá a la venta por 99 dólares, unos 80 euros al cambio actual. La encontraremos en los colores negro, azul, rojo y plateado.
