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Nikon tendrá que hacerle hueco a esta cámara de fotos en su cada vez más amplia gama Coolpix, formada por sus modelos compactos. Esta Nikon Coolpix P7000 no compite en la carrera de los MegaPíxeles, que todavía sigue azotando al mercado en algunos frentes. Prefiere centrarse en ofrecer  prestaciones y herramientas  prácticas. Debido a eso algunos la comparan con la Canon Powershot G11.

Su sensor CCD es limitado: 10,1 MegaPíxeles de resolución. Eso sí. Suficiente para el uso habitual que se hace de las fotos digitales. De todos modos, dispone de soporte para formato RAW, para que los entendidos puedan hacer ajustes finos en las instantáneas. Su lente zoom sería equivalente a un objetivo tipo gran angular, de siete aumentos y apertura máxima de f2,8.

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Su sensibilidad máxima es de 6400 ISO, o bien 12800 ISO en modo nocturno. Dado que en esas circunstancias las imagenes aparecen excesivamente granuladas, la cámara aplica un filtro de reducción de ruido que suaviza algo el efecto. También mejora su definición mediante estabilización de cinco vías, detector de sonrisas y parpadeos, identificación de rosotros o función de seguimiento de objetos.

A la hora de grabar vídeos es capaz de registrarlos en alta definición con resolución limitada a  720p (1280 x 720 píxeles) a 24 fotogramas por segundo. En esa modalidad se apoya en el autofoco continuo y, si se quiere, el uso de un micrófono externo conectado a su entrada de audio. Para ver el material tenemos su panel LCD de tres pulgadas.

La Nikon Coolpix P7000 estará pronto disponible, a finales de septiembre. Su precio oficial para Estados Unidos es de 500 dólares (394 euros). No se conocen los detalles de su lanzamiento en Europa.