Esta es una de las últimas creaciones de Pentax. La cámara compacta Optio S1 incorpora un objetivo zoom gran angular de 28 mm, con cinco aumentos. Para la mayoría de los usuarios resulta más que suficiente, ya que abarca de paisajes a retratos y primeros planos. También puede hacer buenas fotos a una cierta distancia. El zoom inteligente, eso que antes llamaban zoom digital genera 33 aumentos.
La calidad de imagen proporcionada por el sensor de 14 Megapíxeles es buena, con buenos colores, pero sobre todo con claridad y definición en las formas, incluso cuando se utiliza en la función de teleobjetivo. Permite ampliaciones de gran tamaño de las imágenes sin perder apenas definición. Incorpora un sistema triple de estabilización de imagen. Tiene un modo residente en el sensor, otro de altísima sensibilidad, y un tercero específicamente creado para la grabación de vídeo.
Debido quizá a la capacidad de estabilizar las imágenes, proporciona muy alta calidad a la hora de hacer vídeos en alta definición. La grabación se inicia pulsando un solo botón, dedicado específicamente a ello, y graba imágenes en formato panorámico con una calidad de 1280 × 720 píxeles a 30 cuadros por segundo. A la hora de tomar imágenes estáticas, hay que tener en cuenta el modo automático, que asegura que todas las tomas van a salir bien de luz, y bien definidas. Tiene 14 modos distintos de escena incluyendo uno para personas, otro para paisajes, o un tercero para fotos al atardecer.
Como no podía ser menos, también dispone de un buen sistema de detección de caras que enseguida marca el rostro del individuo dentro del cuadro y lo mantiene perfectamente enfocado. Dispone de detector de sonrisas y un modo de piel natural muy creíble. Por fin, muchos usuarios van a quedar encantados con su aspecto. Tiene un acabado en aluminio muy brillante, casi de espejo, que puede coger demasiadas huellas dactilares, pero que le da una pinta excelente. Está disponible en cromo, negro y verde aguamarina.