La cámara compacta Pentax Optio NB 1000 es un modelo muy sencillo, del tipo “apuntar y disparar”. Un equipo muy compacto, que va hacer las delicias de los coleccionistas, y de los aficionados a las novedades. En realidad se parece mucho a la Optio RS1000 que está sobre todo en el mercado norteamericano. Claro que hay una gran diferencia, que reside en el frontal.
El modelo norteamericano permitía cambiar el aspecto frontal colocando pieles y fotos bajo una tapa transparente extraíble. Con la NB 1000 los de Pentax han conseguido una solución más interesante y mucho más divertida. Todo el frontal está cubierto por una superficie tipo Lego donde colocar pequeños bloques de construcción para crear formas de todo tipo. El tamaño es bastante menor que el de los de Lego, y en realidad pertenecen a la juguetera japonesa Kawada que hace una copia de los famosos bloques de construcción bajo la marca comercial de Nanoblocks.
Con estas pequeñas piezas que vienen en diversos colores, el usuario puede colocar todo tipo de formas en el frontal de su cámara, y además puede jugar con los bloques en los momentos en los que está de viaje, aburrido, o no puede hacer fotos. De momento hay dos versiones. La Monotone, que incluye bloques blancos negros, amarillos y rojos, y la Safari que trae verde, amarillo y marrón. Por lo demás, puede ésta ser una de las cámaras más sencillas del mercado, con un sensor de 14 megapíxeles.
El objetivo es también sencillo, y tiene cuatro aumentos, pero el rango está muy bien ajustado. Viene a ser un equivalente a 27.5 en gran angular, que llega hasta 110 mm en teleobjetivo. Buenos paisajes, y retratos aceptables de la gente que vamos conociendo. Este aparato no tiene estabilizador de imagen. A cambio, incorpora un pequeño programa que define las fotos que no han salido demasiado bien por culpa del uso de altas sensibilidades o velocidades lentas.