Donde dije digo, digo Diego. Así se podría interpretar el anuncio que ha llevado a cabo la compañía taiwanesa HTC. Y es que, tras el anuncio que llevaron a acabo el día de ayer en su página oficial de Facebook, en el cual se comentaba que, tras y pese a los esfuerzos realizados por sus ingenieron, se veían incapaces de sacar una actualización oficial a Android 2.3 Gingerbread para el modelo original HTC Desire.

No fueron pocas las quejas, aun pidiendo disculpas la propia compañía. Y es que, debemos recordar que cuando los últimos modelos del fabricante fueron presentados a principios de este año 2011, HTC hizo la promesa de que toda la gama Desire de su catálogo iba a ser actualizada a la última versión de los iconos de Google.

No ha pasado ni un día, y la misma compañía ha rectificado en el muro de su página oficial de Facebook. El mensaje a sido directo: «Contrariamente a lo que dijimos ayer vamos a actualizar Desire a Gingerbread«. Puede ser que tras todas las quejas recibidas, hayan decidido finalmente sacar a la luz la aclamada actualización.

Las quejas eran infundadas, ya que HTC ponía como excusa la potencia del terminal en general. En primer lugar, la memoria RAM no era suficiente para albergar la actualización. Pero aquí no queda todo, sino que al parecer, con Android Gingerbread y la posterior actualización de HTC Sense, el móvil no rendiría bien. Finalmente, la empresa ha rectificado, aunque no ha comentado nada de la fecha exacta.