Ha pasado el verano y con él, el buen tiempo. Pero para los amantes de los deportes acuáticos, no hay estación que ponga frenos a su afición. Así que les alegrará saber que hay un nuevo gadget para asegurar que sus mejores momentos pasan a la posteridad. Las compañías MotionTouch y Predator Technology han unido fuerzas para crear Predator VX360. Una cámara de vídeo sumergible que se coloca en las ropas del usuario y permite filmar en primera persona. Predator fue la compañía que concibió el dispositivo y encargó el diseño a MotionTouch.
Se divide en dos módulos. Lo que se graba se visualiza a través de una pantalla LCD de 2,4 pulgadas que va en el brazo, unida mediante un cable AV. El concepto es similar al de Thanko USB Underwater Video Camera o Contour HD, aunque el panel secundario facilitaría la obtención de mejores resultados. El deportista mantiene las manos libres para ejecutar todo tipo de movimientos y, de paso, los registra para que nadie dude de la veracidad de sus aventuras. En el siguiente vídeo se muestra un ejemplo de los resultados de Predator VX360:
Graba a 352 x 288 píxeles hasta 24 frames por segundo (fps), 640 x 480 píxeles hasta 24 fps y 640 x 533 píxeles hasta 18 fps como resolución máxima. Viene con una tarjeta de memoria SD de 2 Gb, aunque admite hasta 32 gigabytes de capacidad. Es compatible con los formatos MPEG4, DiVX y AVI. La cámara mide 104 x 68 x 46 milímetros y pesa 268 gramos. Cuenta con sensor firmado por Sony. La batería tiene una potencia de 1200 mAh y proporciona una autonomía de hasta 100 minutos.
La carcasa ha sido endurecida para soportar condiciones extremas y golpes contra rocas. Sin embargo, que nadie se haga ilusiones respecto a descender a simas submarinas, porque sólo soporta hasta tres metros de profundidad. Claro que resulta suficiente para quienes practiquen snorkeling o actividades que no requieren de grandes inmersiones, como el surf, el windsurf o la natación.
De momento sólo se encuentra disponible en Reino Unido y su precio es de nada menos que 1400 libras, unos 1.554 euros al cambio actual. Una cifra que debería garantizar la excelente calidad de lo filmado. Si no, casi resulta más económico contratar durante media hora a un director profesional que inmortalice las hazañas de los aventureros.
Vía: Sports Camera
