sandisk_extreme_pro_cf_02

Como puede deducirse a partir de su nombre, las SanDisk Extreme Pro CF son una continuación de las anteriores Extreme Pro SDHC. Se trata una nueva línea de tarjetas de memoria de alto rendimiento, más veloces y con más capacidad. Pero en esta ocasión se ha optado por el formato CompactFlash, un tipo de tarjeta muy común entre fotógrafos y en entornos profesionales.

Existen tres versiones de diferente capacidad: 16, 32 y 64 gigabytes. Que de por sí ya suponen un volumen de almacenamiento muy destacable tratándose de un soporte así. Pero lo alucinante es que pueden alcanzar velocidades de lectura y escritura de 90 megabytes por segundo. No sólo agiliza la transferencia de datos al ordenador, sino que es tremendamente útil en cámaras réflex digitales. Por ejemplo cuando realizamos muchos disparos seguidos y necesitamos comprobar el resultado cuanto antes.

sandisk_extreme_pro_cf_01

Su rapidez se debe a un sistema de arquitectura de doble canal en su controlador (además de otros algoritmos de software). Además de la robustez que se le atribuye a las CompactFlash, éstas vienen cubiertas con un material especial llamado silicona RTV. Así están mejor protegidas contra caídas, además de adquirir mayor resistencia a la humedad y temperaturas extremas.

Como era de esperar, su coste sólo es asumible por profesionales que vayan a sacarle el máximo partido. Sus precios se establecen entre 300 y 800 dólares (de 203 a 543 euros). El lector de SanDisk optimizado para estas tarjetas se vende por separado a 50 dólares (35 euros).

Vía: Techshout