HP Mini 1000 Vivienne Tam – A fondo

Un portátil pequeñito, ligero, manejable y la mar de mono. Por buscar un símil en el mundo de la moda, podríamos definir este HP Vivienne Tam como «el netbook de Agatha Ruiz de la Prada». Si no fuese porque su diseño pertenece a otra modista: la china Vivienne Tam (que a decir verdad no llega a ser tan estrambótica como la señora de Pedro J).

Ahora bien, no estamos ante un equipo que sólo busque distinción visual a través de recursos tan tópicamente femeninos como el color fucsia y los motivos de flores. También es un ultraportátil en toda regla, con un diseño de base y un teclado tan buenos como los del HP Compaq Mini 700. Por no decir que son exactamente iguales.
Y es que, en efecto, el HP Mini 1000 Vivienne Tam es un Mini 700 con diseño especial. Y hay que reconocer que el diseño realmente seduce. Bueno, si nos ponemos quisquillosos, encontramos una diferencia prácticamente imperceptible en la pantalla, como explicaremos más adelante. Pero por el resto estamos ante el mismo equipo, sólo que éste cuesta 200 euros más. ¿Justifica el trabajo de la diseñadora tanta diferencia de precio?

Es una pregunta que tendrá que responderse cada usuario. Y es que esto de pagar por un diseño especial resulta absurdo para unos y fundamental para otros. Pensemos en los pocos que prefieren equipos de la firma Bang & Olufsen, por ejemplo. Y eso que los equipos de esta compañía danesa tienen un sobreprecio descomunal para lo que ofrecen. O repasemos las ventas del famoso iPod de Apple, un MP3 sensiblemente más caro que el resto. A pesar de este hecho, el iPod ha terminado convirtiéndose en el estándar absoluto del mercado gracias a su diseño superior.

Dicho esto, nos limitaremos a desgranar las virtudes de este netbook tan especial.

En la curva está el estilo

Visualmente, el diseño de los últimos ultraportátiles de HP es sin duda el más atractivo. Y la idea es bastante simple: se parte de una anchura suficiente para albergar un teclado cómodo (261,7 mm) y se comprimen la profundidad (166,7mm) y el grosor (25,2 mm). Además, todo el perímetro del equipo es completamente curvado, para que la carcasa ocupe el menor espacio posible en el vacío y se minimice el peso.

En el caso de este HP Mini 1000 Vivienne Tam, y como también sucede con el HP Compaq Mini 700, el peso se queda prácticamente en un kilo redondo. Ahora bien, en ello también influye y mucho el uso de una batería delgada que se fija al equipo por la parte inferior. Así no se comprometen ni el peso ni el grosor, pero sí la autonomía (como veremos dentro de algunos párrafos).
El teclado del HP Mini 1000 Vivianne Tam vuelve a repetir la misma historia: el espacio disponible se ha aprovechado casi al cien por cien, por lo que escribir en él es prácticamente tan cómodo como si tuviéramos delante un portátil de tamaño más convencional. Se trata de una matería en la que poco a poco todos los fabricantes se van dando cuenta de que hay que dar un do de pecho en pos de la usabilidad (hasta la propia Asus ha dejado atrás sus teclados de juguete y ha seguido el camino de Acer lanzando modelos mucho más manejables como el Asus Eee PC 1000HE).

Eso sí, la sensación al pulsar las teclas de este HP Vivienne Tam es algo distinta. Las teclas del HP Compaq Mini 700 tienen el tacto liso habitual de muchos portátiles, pero en este netbook florido parece como si las teclas estuviesen barnizadas. Seguramente debido al color especial, el material plástico del teclado y el reposamuñecas transmite una sensación como de mueble recién estrenado, y de hecho la superficie es bastante más brillante que el negro piano del Mini 700.

En cuanto al resto de controles, el HP Vivienne Tam incluye las mismas virtudes y defectos que el Mini 700. Lleva un par de palancas en el frontal, para encender/apagar el equipo y activar/desactivar las conexiones inalámbricas, y un touchpad con botones laterales que cuenta con un botón de activación/desactivación justo arriba. Como vemos en la imagen, dicho botón se podría haber colocado en otro sitio, para agrandar el tamaño del touchpad o colocar los botones principales debajo de éste.

Pantalla panorámica de verdad

Al principio os decíamos que la pantalla es el único punto técnico en el que este HP Mini 1000 Vivienne Tam se distingue del HP Compaq Mini 700. Pero la diferencia es muy nimia. Sólo si nos fijamos muy de cerca en ambos portátiles a la vez, nos damos cuenta de que, aún teniendo exactamente las mismas dimensiones, la pantalla del HP Vivienne Tam aprovecha un poquito menos el espacio disponible.

La anchura de ambas pantallas es exactamente la misma, pero la del HP Vivienne Tam es ligeramente menos alta. La diferencia es de apenas medio centímetro, de ahí que la diagonal sea de 10,1 pulgadas, frente a las 10,2 pulgadas del HP Mini 700. Como consecuencia, también se pierden algunas líneas de resolución. Concretamente, 24, pues estamos hahblando de 1024 x 576 píxeles, frente a los 1024 x 600 del Mini 700.

A la hora de la verdad, ¿esto se nota en algo al visualizar documentos y páginas web? Pues la verdad, no. La diferencia es tan nimia que sólo la apreciaría un director de cine al reproducir un vídeo. Y es que todo se debe a que la pantalla del HP Vivienne Tam está montada en proporción panorámica 16:9. No es que sea una gran ventaja, porque la pantalla es pequeña y no es la octava maravilla del mundo a la hora de ver cine, pero tampoco es un defecto.

Conexiones convencionales

En la parte inalámbrica, no se le puede objetar nada a este HP Vivienne Tam, pues tiene Wi-Fi y Bluetooth. La firma se ha reservado la conexión 3G integrada para el HP Compaq Mini 705, que sigue el clásico acabado negro. Ahora bien, como también pasaba en el Mini 700, hay algunos puntos en las conexiones físicas del Vivienne Tam que no tiene perdón.

Empezando por la salida de vídeo, que no es la VGA estándar de toda la vida, sino una conexión fina y alargada para la que tendríamos que hacernos con un adaptador. Luego tenemos que hablar de la unidad HP Mini Móvil. ¿Qué es? Un puerto que viene tapado en un lateral, y al que podríamos conectar un accesorio de almacenamiento de la propia HP.

En cuanto a los puertos USB, el HP Vivienne Tam lleva dos, uno a cada lado. El uso de un sólo conector de audio que sirva independientemente para auriculares, altavoces y micrófono es correcto. Al fin y al cabo, para los usos habituales de un netbook rara vez necesitaremos algo más que su micrófono y sus altavoces integrados.

El equipo también funciona con programas de videomensajería. Lleva la obligatoria cámara web integrada en el marco. Para cerrar este apartado, también encontramos en el HP Vivienne Tam un lector de tarjetas de memoria SD y MMC, así como un puerto Ethernet que podemos mostrar u ocultar gracias a una tapa de goma.
Un netbook genérico

Aunque visualmente este HP Vivienne Tam tenga muchos elementos que lo distinguen del resto de netbooks, lo cierto es que su equipamiento es prácticamente el mismo de siempre en este tipo de máquinas. Con la excepción del disco duro, que se queda en 60 GB frente a los 120 o 160 GB que llevan los ultraportátiles más completos. Su interior, como ya es más que costumbre, está gobernado por un procesador Intel Atom N270 a 1,6 GHz, y lleva 1 GB de memoria RAM para trabajar con soltura en Windows XP.

Como ya hemos comentado en anteriores ocasiones, la ventaja de esto es que realmente un netbook no necesita mucho más para cumplir todas las funciones para las que está pensado. En el caso de este HP Vivienne Tam, el sistema se arranca completamente en poco más de medio minuto y se apaga en unos diez segundos. Su rendimiento es bastante satisfactorio en todos los aspectos, siempre y cuando no le carguemos programas especialmente pesados en la parte gráfica, pues lleva una tarjeta integrada Intel GMA 950.

El único punto en el que sentimos que el HP Vivianne Tam se puede mejorar es la autonomía. Y no lo decimos porque no haya otros netbooks que, trabajando a pleno rendimiento, sólo agüanten un par de horas sin recurrir al cargador, sino porque la autonomía es precísamente uno de los puntos en los que más se está incidiendo en las últimas hornadas de ultraportátiles.

En otras palabras, este HP Vivienne Tam lleva una batería de tres celdas fina y ligera para mantener un diseño delgado y liviano, a cambio de la mejor autonomía.

HP ya ha comenzado a vender en Estados Unidos baterías de seis celdas para sus miniportátiles, como la que vemos a la derecha. Es exactamente igual que la batería que viene con el HP Vivienne Tam, excepto por el color y por ese contorno redondeado que, en la práctica, aumenta el peso y el grosor del equipo, además de levantarlo ligeramente por la parte trasera sobre la superficie en que lo apoyemos. Y por supuesto, se paga aparte a unos 100 dólares.

¿Quién quiere un HP Mini 1000 Vivienne Tam?

Nos vais a permitir el topicazo, pero este pequeñín tiene un diseño claramente orientado hacia el público femenino. Y dentro de éste, a aquel especialmente interesado en la moda y las tendencias. Y no sólo porque venga firmado por una diseñadora de cierto renombre, sino porque tiene un aspecto impactante y elegante que recuerda un bolso de diseño, aunque en su interior sigue siendo básicamente el mismo HP Compaq Mini 700 que se vende a 400 euros. Al final, este HP Vivienne Tam apela al sentido emocional del usuario que aprecia el diseño. Un diseño que, según nuestra experiencia convence y seduce a las féminas.

Puntos fuertes

Aún sin su llamativo color y su acabado con motivos florales, el HP Vivienne Tam ya es en sí un netbook con muy buen diseño. Tiene un peso bastante reducido y su teclado es, como ya mencionamos al hablar el Mini 700, el mejor de todos los que hemos podido probar en un ultraportátil. En el apartado técnico, destacar también que trae Bluetooth de serie.

Se puede mejorar

Pagar 200 euros más por el diseño de este HP Vivienne Tam, como decíamos al principio, es algo que depende del usuario final.

Si buscamos principalmente diseño y no nos importa pagar más, estos factores no influyen tanto. Pero con todo, la conexión no estándar de vídeo y el puerto HP Mini Móvil son elementos que se podrían depurar en este HP Mini 1000 Vivienne Tam.

Ficha técnica