2010 ha sido un año muy positivo en lo que respecta a las ventas de televisores de tipo LCD. Sin embargo, los analistas creen que en 2011 no marcharán tan bien. Según las previsiones, el mercado global continuará creciendo, pero a un ritmo muy inferior al del pasado año. Hasta el punto de que, si se cumplen sus predicciones, podría producirse el primer descenso en volumen de negocio de su historia. Es decir, producirán menos ingresos para las compañías.
Según el estudio realizado por DisplaySearch, a lo largo de 2011 se venderán 215 millones de televisores LCD. En efecto, los números son superiores a los registrados en 2010, donde se colocaron 190 millones de unidades. Sin embargo, si miramos los porcentajes, el crecimiento que les depara este año disminuirá del 31% a sólo el 13%. Una bajada que curiosamente vendrá precedida del máximo histórico en la venta global de televisores (247 millones en total el pasado ejercicio), incluso a pesar del azote de la crisis económica en 2008 y 2009.
El informe señala que el estancamiento de los precios es una de las más que posibles causas de esta caída. Los televisores cuestan prácticamente lo mismo (en Europa incluso se han pactado precios entre fabricantes). Ha habido que esperar al último trimestre del año para ver las primeras rebajas, y éstas no han llegado hasta que las compañías se han encontrado con que no habían vendido tantos televisores LCD como esperaban.
Los responsables argumentan que la congelación de los precios se ha compensado con la inclusión de nuevas tecnologías en los televisores, como por ejemplo la integración de Internet y servicios como Google TV. Sin embargo, con la economía todavía lamiéndose de las heridas de la crisis, el consumidor mira antes el bolsillo que las prestaciones adicionales. DisplaySearch apunta que a partir de ahora el crecimiento se centrará en países emergentes, donde la tecnología de estas teles no está tan implantada.
De informe también se desprende que los LCD son los que mandan, acaparando el 50% de la distribución mundial (a excepción de ciertas zonas de Asia). A partir de ahora la mayoría dispondrán de retroiluminación LED, lo que marca la rápida expansión que ha tenido este sistema que mejora el brillo de la imagen y optimiza el consumo. Por su parte, las pantallas de plasma han mantenido su pogresión en 2010, colocando 18 millones de unidades (crecimiento del 28%), en parte porque sus precios sí han venido reduciéndose progresivamente. ¿Y los televisores 3D? A pesar de que las compañías han querido acelerar la transición aprovechando el mundial de fútbol, sólo han venido tres millones de unidades.
Foto: Indiana Stan