La Sanyo DMX-CA8, de la familia de videocámaras Xacti, es la primera de una pequeña gama de modelos de videocámaras digitales de Sanyo resistentes al agua. Y cuando decimos resistente al agua no queremos decir que no se estropeará si la salpicamos, sino que es sumergible hasta un metro y medio de profundidad. Su compartimento de almacenamiento de tarjetas SD, la batería y la conexión por USB se han colocado en un compartimento estanco del mango. Aunque si vas a grabar pocos vídeos no tendrás siquiera que abrirlo, pues incorpora 44 megas de memoria interna.
Para sacar los vídeos, tanto en seco como debajo del agua, incluye un sensor de 8 megapíxeles y la tecnología de detección de rostros (capaz de tratar seis a la vez) para fotos y vídeos, que se está imponiendo en la mayoría de modelos actuales de cámara.
Otras características de esta nueva videocámara de Sanyo son un zoom óptico 5x integrado en su pequeñísimo cuerpo, la posibilidad de grabar vídeos a alta velocidad (60 fps) o el estabilizador digital de imagen, para evitar las clásicas imágenes movidas.
También puedes imprimir tus fotos conectando la cámara directamente a la impresora, sin pasar por el ordenador. Incluso incorpora una técnica de reducción del molesto ruido de viento en la grabación.
Para ver cómo se mueve una cámara en el medio acuático, hemos preferido evitar los típicos vídeo-reportajes comerciales, llenos de falsas risas y aburridas demostraciones, y mostrarte la experiencia real de un submarinista americano. En su caso emplea una cámara de la familia Xacti prácticamente a ras de superficie.
La familia de aparatos de alta tecnología resistente al agua e incluso sumergible ya era extensa antes de que la DMX-CA8 hiciese aparición: hace poco hablábamos de accesorios de PC resistentes al agua como un lápiz USB que podía mojarse sin problemas o un ratón lavable, aunque existen aparatos mucho más complejos como un televisor pensado para la bañera o incluso un coche descapotable submarino de la marca Rinspeed.
La videocámara más playera de Sanyo se pondrá a la venta en el mes de mayo, estará disponible en colores anaranjado, blanco, azul y negro y su precio se situará en torno a los 300 euros. Si te gusta sacar vídeos y hacer fotos debajo del agua, ésta puede ser tu cámara.
Vía: xataka