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Igual a alguien le suenan estas increíbles pantallas, pues hace unos años que vienen haciéndose, lo que pasa es que cada vez son más espectaculares. Se trata de Magic Mirror de Ad Notam, un original sistema de estructuras de cristal y espejos que, al combinarse con pantallas, dan la increíble sensación de tener una televisión suspendida en el aire, si no, sólo hay que ver las fotos.

La empresa alemana Ad Notam vende estos muebles que están a mitad de camino entre la magia más artesanal y el milagro tecnológico. En cualquier caso, además de sorprender (y permitirnos presumir mucho, por qué no decirlo) el Magic Mirror es ideal para hacer más grandes espacios pequeños.

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El mueble tiene integrado dentro un televisor LCD que puede ser de tres tamaños, o bien de 37 o bien de 46 o bien de nada más y nada menos que 105 pulgadas. El televisor está especialmente diseñado para que pueda verse de manera óptima a pesar de tener un cristal delante.

En el momento en el que apagamos el televisor este desaparece detrás del cristal y todo se queda como un espejo normal, bueno, normal normal no es tampoco, porque en el caso de que lo activemos disfrutaremos de una espectacular retroiluminación LED que nos mostrará, a modo de salvapantallas, fotografías, retratos, chorros de arena o círculos.

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Gracias a un sistema magnético, uno puede pedir que la pantalla esté en cualquier punto del espejo. Se coloca y después se sella herméticamente. Hasta ahora es frecuente verlo en hoteles, ya que su elevado precio lo convierte en inaccesible para un hogar particular aunque claro, hay hogares y hogares.