Esta es una de las últimas incorporaciones al catálogo de Toshiba. Se trata de un ordenador portátil tipo laptop que resulta ideal para negocios y empresas grandes y medianas. El Tecra S11-11D es un aparato bien acabado, con la superficie exterior terminada con una textura que facilita el agarre. Su color negro carbón hace que se noten menos las huellas dactilares. Es una máquina más delgada y algo más ligera que equipos de generaciones anteriores pero igual de resistente y de capaz. Su batería, de Iones de Litio, tiene una autonomía máxima de tres horas y media, y el tiempo de recarga con la máquina apagada es de dos horas y media.
Incorpora procesador Intel Core i5 520M, con velocidades de 2,4 a 2,9 gigahertzios. Instala en placa cuatro gigas de RAM en dos módulos, aunque es posible ampliarlo hasta ocho gigas. Su punto fuerte es la pantalla lcd con retroiluminación led, de 15,6 pulgadas y con una resolución de 1600 por 900. La luminosidad es buena, 220 candelas por metro cuadrado, y el contraste de 300:1 garantiza que el visionado será correcto incluso a la luz del sol. La unidad óptica puede trabajar con todos los formatos imaginables de DVD y CD, tanto en lectura como en escritura.
Con unas medidas de 375 x 250 x 33,4 mm, esta máquina pesa 2,8 kilos lo justo para que llevarla consigo no represente un engorro excesivo. Integra un disco duro de 320 gigas Serial ATA-2, con una velocidad de 7200 rpm y con protección y sensores de movimiento en los tres ejes. Como buena máquina nómada, tiene un teclado resistente a las salpicaduras. Dadas sus características, es un ordenador estupendo para hacer presentaciones, y no sólo por la pantalla, sino también por sus capacidades de sonido y por los altavoces integrados.
Integra un montón de prestaciones interesantes, como por ejemplo su tarjeta de red local, el módem de última generación para esas ocasiones en las que no hay una red de alta velocidad disponible, Bluetooth, y WiFi. De hecho, es posible mantenerse en contacto con la oficina gracias a la webcam que lleva incorporada en el marco de la pantalla. También tiene un lector de huella digital, que mejora la seguridad. De serie viene con Windows 7 profesional de 64 bits, pero quien lo desee podrá aprovechar también la instalación alternativa de Windows XP profesional que también viene de serie con su propio disco de recuperación. Dependiendo de la configuración, su precio ronda los 1050 euros.
