Los lectores de libros electrónicos (e-readers) están captando la atención de los consumidores. La demanda de títulos editados en formato digital está aumentado en todo el mundo, tanto en el ámbito de la lectura por razones de ocio, como el mundo de la enseñanza y de la universidad. Los dispositivos especializados en la reproducción de libros electrónicos suelen utilizar para sus pantallas unos paneles de tinta electrónica (e-ink) que son en blanco y negro.
La principales ventajas de las pantallas de tinta electrónica son el aumento de la autonomía del dispositivo, y que resultan más cómodas para los ojos. Son muchas las compañías que están desarrollando sus propias soluciones para pantallas en color sin retroiluminación. Entre ellas se encuentra Hewlett-Packard.
Estos paneles de tinta electrónica consiguen reflejar la luz, en lugar de filtrarla desde una fuente de iluminación trasera. Sin embargo, esa dependencia de la luz ambiente es un lastre cuando se trata de conseguir una pantalla brillante con colores vivos. Los investigadores de HP trabajan en distintos materiales sintéticos con propiedades luminiscentes.
El equipo de HP ha desarrollado un resina compuesta que convierte la luz azul y la verde en roja, y otro que convierte la luz azul en verde. Debajo de cada píxel han puesto un obturador de cristal líquido de rápida activación que tapa o deja salir la luz, según corresponda. Una serie de microespejos ayudan a la emisión de luz. Ahora el esfuerzo de los investigadores se centra en métodos de producción a gran escala para estos materiales.
