Ese día que, quizás, temías, ha llegado. El momento en que entregas a tu hijo su primer teléfono móvil. Un mundo completamente abierto se cierne ante tu descendencia. Todo lo bueno que está por llegar, aunque también lo malo y sus peligros. Nuestra intención, con este especial, no es decidir a qué edad deberías darle a tu hijo su primer teléfono móvil. Eso es una decisión muy personal que compete solo al afectado. Lo que sí podemos conseguir es que el teléfono que le entregues a tu hijo sea lo más seguro posible para poder hacer frente a esos peligros de Internet a los que hacíamos mención.
En esta guía encontrarás todo lo posible para convertir un móvil cualquiera en el móvil perfecto para que tu hijo pequeño pueda usarlo, sin que temas por su seguridad. Si sigues nuestros consejos paso a paso, podrás estar un poco más tranquilo. Pero, al final, todo se resume a la educación que le demos a nuestros pequeños. El móvil es una herramienta y como tal debemos conocerla y saber usarla. ¡Comenzamos!
Empezando por lo básico: restringe aplicaciones no deseadas
Tú eres el único que debe instalar aplicaciones en el móvil de tu hijo. Antes de entregarle el teléfono, deberás instalar todas aquellas aplicaciones que creas conveniente que debe usar, registrando tu teléfono con tu propia cuenta de Gmail. En la tienda de aplicaciones de Google Play Store el padre tiene a su disposición una guía por edades donde podrá ver si una aplicación es recomendada o no para su hijo. Además, por supuesto, podrá configurar la tienda para que solo él pueda descargar e instalar aplicaciones.
Para activar el control parental de las aplicaciones y juegos de Google Play Store vamos a hacer lo siguiente.
Abrimos la aplicación de Google Play y pulsamos el icono de tres rayas que tenemos situado en la parte superior izquierda de la pantalla. A continuación, en el menú emergente lateral que aparece, pulsamos en ‘Ajustes’ y luego ‘Control parental‘.
Activamos y colocamos un pin que solo sepamos nosotros. Puedes restringir las aplicaciones hasta 3 años.
Aún así, también debemos restringir las compras a tu hijo, puesto que hay aplicaciones toleradas que son de pago. Para ello, lo mejor que podemos hacer es configurar la Play Store para que las compras se efectúen a través de la huella dactilar. Para ello, volvemos a entrar en los ajustes de Play Store y vamos a dos apartados en ‘Controles de usuario’: Autenticación con huella digital, que deberemos dejar activado y ‘Pedir autenticación para realizar compras’ que dejaremos en ‘Siempre’.
Podemos ir más allá, si hiciese falta. ¿Quieres tener la posibilidad de que tu hijo ni siquiera pueda entrar en Google Play y descargar aplicaciones recomendadas para él? Te sugerimos, entonces, que descargues alguna aplicación de terceros para ‘cerrarlas’ mediante huella o pin. Para tales menesteres te podemos recomendar la aplicación Applock (Cerradura), una app gratuita que podemos encontrar en la Play Store. Contiene publicidad y su archivo de instalación tiene un tamaño de 5 MB.
Nada más abrir la aplicación tendremos que colocar un patrón de desbloqueo. A continuación, ingresaremos un correo electrónico de seguridad. Una vez hecho, en el apartado ‘Avanzado’ veremos la aplicación de Google Play Store. Pulsamos. Habilitamos el acceso al sistema por parte de Applock (seguimos instrucciones en pantalla) y listo. Ahora, cuando tu hijo quiera entrar en Google Play Store, se le pedirá que coloque el patrón que solo usted conoce. Si a su hijo se le ocurriese intentar desinstalar esta app para librarse del patrón, no podrá hacerlo, pues el sistema pedirá nuevamente el patrón para su desinstalación.
Ni que decir tiene que con esta aplicación Applock podremos no solo bloquear el acceso a la tienda de aplicaciones sino a los ajustes del teléfono, a las redes WiFi… a todo lo que necesites que esté instalado en el teléfono de tu hijo pero no quieres que él tenga acceso.
Un móvil para saber dónde está tu hijo cada vez que se lo pidas
Nuestro hijo recibe un móvil y lo que ve es una herramienta de entretenimiento. Nosotros se lo entregamos y lo que vemos es un maravilloso dispositivo de seguridad con el que tenerlos constantemente controlados. Para ello, lo mejor y más sencillo que podemos hacer es instalar en su teléfono y en el nuestro la aplicación ‘Encontrar mi dispositivo‘. Con esta aplicación vamos a poder ‘pedir’ que nos muestre donde se encuentra el dispositivo en todo momento. Entramos con nuestra cuenta de Google y damos permiso de ubicación.
A continuación, en nuestro móvil, hacemos lo mismo. Ahora, solo tenemos que elegir el móvil de nuestro hijo para que nos indique, en el mapa, donde se encuentra. Y listo. También podremos hacerlo sonar a distancia o bloquearlo a distancia.
Páginas web… solo para todos los públicos
Evidentemente, uno de los mayores usos que le va a dar tu hijo al móvil es el de poder navegar por Internet. Y todos sabemos que hay ciertas páginas que no debería visitar en ningún modo. Para ello, deberemos bajarnos una aplicación de terceros como SecureKids, una herramienta muy completa para mantener la seguridad de tu hijo en multitud de aspectos, entre los que se incluye la navegación por Internet. Puedes usar gratis una cuenta de SecureKids en un solo dispositivo. Puedes controlar todo lo relacionado con el móvil de tu hijo a través de la página web de SecureKids.
Gracias a esta aplicación, tus hijos no podrán acceder a páginas web con contenido pornográfico, violento o relacionado con las drogas. Desde el panel de control podrás activar y desactivar las distintas categorías de web para que tu hijo está tranquilo y seguro. Además, para desinstalar la aplicación deberemos nosotros mismos indicar nuestro nombre de usuario y contraseña para que tu hijo no pueda hacerlo por sus propios medios.
Con esta guía el teléfono de tu hijo estará listo para que él pueda usarlo sin estar en peligro. No obstante, otros factores como el tiempo de uso tendrá que partir de ti y de las charlas que tengas con él al respecto. Sabemos lo duro que es educar a un hijo así que, desde tuexperto, te mandamos nuestros mejores deseos.
